El casco es uno de los equipos de seguridad que salva vidas cuando se trabaja en obras de construcción.
El casco de protección es tal vez uno de los equipos de protección personal más conocidos y destacados en la construcción. La imagen de un casco es tan ligada a los trabajos de la construcción, que se ha vuelto el símbolo inquebrantable de las obras civiles a nivel nacional e internacional.
Los cascos de protección vienen en diferentes estilos y colores, pero para ser aprobados por OSHA, deben cumplir con ciertos requisitos del Instituto Nacional Americano de Normas (ANSI Z89.1). Los requisitos de ANSI clasifican a los cascos por su tipo y por su clase para poder ayudarles a los trabajadores encontrar el casco que los protegerá de los peligros que encuentran en sus lugares de trabajo.
No importa que tan conocidos sean los cascos, y lo fácil que son para usarse, a muchos de ustedes se les olvida o rehúsan emplearlos.
Un casco de protección es uno de los equipos de seguridad más importantes que puedes usar. Estos dispositivos de plástico por lo general son tu única defensa en caso de que un objeto caiga desde arriba y te pegue en la cabeza. Son diseñados para reducir el impacto tanto en el cráneo como a tu cerebro.
Una sola lesión de la cabeza puede ser mortal o puede causar daños cerebrales graves permanentes.
Una decisión nada inteligente
Es muy alarmante que a pesar de toda información disponible en cuanto a cómo los cascos salvan vidas, aún hay muchos trabajadores de la construcción quienes violan las normas de seguridad, y se niegan a usar su sentido común, al rehusarse a usar un casco. No es una decisión inteligente o segura. El simple hecho de ponerse un casco puede ser una acción positiva de tu parte para precautelar tu salud y vida.
Requisito OSHA
OSHA requiere –es un requisito y no una recomendación- que uses casco en los sitios de la obra donde haya la posibilidad de caída de objetos, donde te puedas golpear la cabeza contra un objeto fijo o saliente y cando pueda haber contacto accidental de la cabeza con peligros eléctricos como cables de alta tensión.
Debes inspeccionar tu casco periódicamente para cerciorarte que no tenga abolladuras, rajaduras, o deterioraciones. Los cascos deben reemplazarse luego de un golpe fuerte o contacto eléctrico.
Consejo
Todos los días que estés en el trabajo usa tu casco. Si decides no usar uno, a la única personas que pones en peligro es a ti mismo y lo que conlleva que tu familia sufra por lo que podría ocurrirte. No seas necio y siempre lleva puesto el casco de protección.
