De acuerdo con el Ministerio del Ambiente, en Ecuador solo el 4% de los residuos plásticos son reciclados, mientras que más del 50% de los desechos generados en el país provienen de actividades industriales (INEC, 2022). Frente a este reto, Eternit, empresa ecuatoriana con más de 68 años de trayectoria en el desarrollo de soluciones innovadoras para la construcción, ha implementado un modelo de economía circular que integra la reutilización de materiales en sus procesos productivos.
La compañía incorpora cartón, polipropileno y material recuperado scrap dentro de su cadena de producción, reduciendo así su huella ambiental y generando empleo verde en el país. Actualmente, el cartón reciclado representa el 3% de la formulación de sus placas de fibrocemento, mientras que el material recuperado scrap aporta un 7% adicional. En su línea de cubiertas de polipropileno, el 65% del material proviene de plásticos reciclados, como sacos, envolturas de snacks y otros residuos postindustriales recolectados y reprocesados.
Estos resultados son posibles gracias a alianzas estratégicas con empresas industrias nacionales, que trabajan en conjunto para dar una nueva vida útil a empaques flexibles. Este esfuerzo colectivo no solo impulsa la cultura de reciclaje en Ecuador, sino que también fomenta el empleo local y fortalece la cadena de valor industrial.
“Desde Eternit trabajamos por un modelo de producción sustentable donde los residuos ya no son desechos, sino oportunidades. Con estas iniciativas, buscamos cerrar el ciclo de la economía circular y seguir innovando en soluciones responsables con el planeta”, afirma Alex Carrera, Gerente de Producción de Eternit.
El modelo implementado por Eternit se presenta como un referente en la transición hacia una industria más sostenible. Alineado con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), esta iniciativa contribuye directamente a Producción y Consumo Responsables, al optimizar recursos y reincorporar materiales reciclados en su cadena de producción; a Acción por el Clima, al reducir la huella ambiental mediante la disminución de desechos y el uso eficiente de materias primas; y a Alianzas para Lograr los Objetivos, al establecer colaboraciones estratégicas con empresas y actores clave para fortalecer la economía circular.
