Será la red de transporte subterráneo de la capital, cuya construcción arrancará en el segundo semestre del 2012. La primera línea de esta red de trenes subterráneos será inaugurada en el 2016.
Los estudios de factibilidad de lo que será el metro para Quito están concluidos. Su construcción y posterior operación, como eje vertebrador de un Sistema Integrado de Transporte, tiene entre sus objetivos principales acortar el tiempo destinado a los desplazamientos, mejorar la calidad de vida, tener una ciudad competitiva e integrar social y económicamente a los sectores periféricos.
Debido a la inusual configuración geográfica de la ciudad, el problema del transporte público en Quito se ha ido agudizando en los últimos años, al punto de ser considerada ahora como inviable.
El Metro de Madrid inició en 2010 los estudios de factibilidad que determinaron aspectos tanto de consistencia de suelo, ubicación de las estaciones, entre otros. Estos estudios resultaron favorables y concluyeron que el recorrido de la línea 1 debía ser entre Quitumbe y El Labrador; cuya construcción empezaría a partir del segundo semestre del 2012.
11 estudios previos al metro de Quito
El técnico Fernando Diéz Rubio, ingeniero de Caminos, Canales y Puertos del Metro de Madrid, informó que las perforaciones o sondeos de suelo se hicieron cada 300 metros a lo largo de los 22 kilómetros de trazado del metro, a razón de dos sondeos por estación y a profundidades de hasta 80 metros.
Estos estudios ya definen el tipo de suelo que existe en el sur, centro y norte de la ciudad. En todo el trayecto se han hecho 70 perforaciones, más de 2.800 metros perforados en total, y ensayos de resistencia sísmica. Por ejemplo, se ha encontrado cangahua o tierra dura en La Carolina y roca volcánica en el sector de El Panecillo.
Como resultado, se concluye que el 99% del subsuelo en el trazado de la ruta del metro de Quito, está conformado por suelos compactos, especialmente de la formación cangahua y que apenas el 1% restante es roca andesita ubicada en las proximidades de El Panecillo. También se ha hecho un estudio sostenido de las estructuras de las edificaciones por dónde va el trazado del metro.
El alcalde de Quito, Dr. Augusto Barrera señaló que los estudios determinan que en el suelo capitalino es factible construir el metro subterráneo de Quito y no a nivel de superficie porque dividiría la ciudad y cortaría varios cruces importantes de circulación. De esta forma, se consolida aún más el proceso que llevará a Quito a formar parte de las 170 ciudades en el mundo que ya poseen el metro, urbes que, sumadas todas ellas, tienen 8.000 kilómetros de túneles y 7.000 estaciones edificadas en diferentes puntos del planeta.
os estudios detallan además los acuíferos, las quebradas y las características de suelo. Frente a esos elementos, el análisis determina la tecnología para solucionar los aspectos constructivos de la obra.
Métodos constructivos
El estudio propone tres métodos constructivos para la ejecución de la Primera Línea del Metro de Quito: ‘cut and cover’ o entre pantallas, excavación en mina mediante métodos convencionales, y en modo cerrado a través de tuneladoras.
Estos métodos garantizan la seguridad y confiabilidad de los trabajos y sus entornos, bajo las condiciones técnicas particulares de la ciudad como son su ubicación en una región sísmica, presencia de agua en niveles arenosos, existencia de quebradas y colectores, así como el cuidado de bienes patrimoniales en el Centro Histórico.
Cut and Cover
Sobre la base de esta definición técnica, el método cut and cover, será utilizado en estaciones y en el túnel de la línea, en la zona urbana en donde el trazado es superficial. Es decir, con cut and cover se harán 3.600 metros, con el método convencional de excavación de mina 5.500 metros, y con tuneladora se abrirá un tramo de 3.400 metros. En el norte, en El Labrador, un tramo pequeño se haría con cut and cover y también en la zona Quitumbe hasta Solanda, es decir un total de 3 kilómetros.
Sistemas de pantallas
El segundo método, denominado convencional o con maquinaria pequeña y a mano, se aplicará para una extensión de 5.500 metros o el 24% del túnel, y se aplicará sobre todo en el Centro Histórico de Quito como técnica preventiva de cualquier tipo de afectación que se pudiera ocasionar a esta zona de la ciudad. En este sentido es importante conocer que en Quito existe una amplia red de colectores y sistemas de alcantarillado construido bajo este sistema que garantiza su seguridad y eficiencia.
Este método será utilizado en dos sectores, en el trayecto que atravesará Solanda y en tramo entre la Av. 24 de Mayo y la estación de El Ejido. Se ejecuta a un promedio de 50 metros por mes.
Tradicional
El tercer método será aplicado en el 60% de la construcción del túnel, en 13.400 metros de extensión utilizando dos tuneladoras, equipos de última tecnología e idóneos para trabajar en el tipo de suelos predominante en Quito, que además asegura el cruce de zonas de quebradas sin afectar a estructuras próximas.
Dicho método tendrá dos frentes, el primero entre la avenida 24 de Mayo y el ingreso a Solanda y, el segundo frente entre El Labrador y la Estación El Ejido. La tuneladora puede perforar hasta 400 metros por mes.
Opiniones
“Considero que este tipo de proyectos tienen la ventaja de ser ambientalmente convenientes para la ciudad y la salud de los habitantes porque se reduce de manera sustancial la contaminación. Su ejecución es factible ya que la tecnología actual permite la construcción de este tipo de proyectos. Socialmente tendrá su impacto en la generación de fuentes de trabajo y significará un mejoramiento de la competitividad de la ciudad y un cambio cultural. Además, con el Metro se rescatará la capitalidad de Quito que ha perdido su competitividad e importancia nacional e internacional por falta de proyectos de esta naturaleza”.
Ing. Hermel Flores, Presidente de la Cámara de la Construcción de Quito.
“El inicio de la construcción de las estaciones multimodales de La Magdalena y El Labrador, así como de las cocheras y talleres de mantenimiento de los trenes en Quitumbe, empezarán el presente año”.
Edgar Jácome, Gerente del Metro de Quito.
“El metro es un proyecto fundamental para el transporte porque será el eje vertebrador del sistema integrado de transporte. El metro incluirá a los otros corredores viales mediante sistemas de integración. Además, el trazado del metro no necesariamente reemplazará al Trolebús y dependerá de la demanda de pasajeros para saber la ubicación de estaciones y paradas”.
Germánico Pinto, gerente de la empresa de Movilidad y Obras Públicas (EPMMOP).
Dos de las rutas que recorrerá el metro de Quito:
Detalles del proyecto
Costo: $ 1.386 millones
Transportará: 370.000 personas al día
Financiamiento: Gobierno financiará el 50 por ciento de la obra, mientras que el otro 50 por ciento sería financiado por el Municipio y la propia gestión del metro.
Recorrido: Atravesará a la capital desde el sector de Quitumbe hasta El Labrador y viceversa.
Primera línea: Comprenderá 21 Km de distancia y estaría concluida en el 2015.
El costo del pasaje: $0.40 centavos.