El hábitat residencial se lo establece, en cuanto permita satisfacer los requerimientos fisiológicos de la familia o núcleo familiar, su consecuencia en un entorno social, contexto urbano, diversidad, accesibilidad y que permita una calidad de vida en todas las familias.
Se debe iniciar con la vivienda en su diseño arquitectónico, el cual debe realizarse en base al análisis físico del lugar donde se va a implantar la vivienda, considerando lo siguiente:
- La geometría del terreno y sus restricciones en cuanto a la ordenanza municipal sobre uso de suelo.
- Los indicadores sobre el clima, para la orientación y organización espacial al interior de la vivienda
- El nivel de confort en cuanto se establezca un balance térmico entre la temperatura exterior e interior, lo cual se lo evidencia en la cubierta, tamaño y ubicación de vanos en puertas y ventanas.
- Adicional, debe generar un enfriamiento pasivo, en base a la velocidad del viento y renovación de aire en los ambientes.
El entorno social es influyente, por las interrelaciones entre los miembros de las distintas familias en el exterior de las viviendas, generando espacios colectivos abiertos o cerrados, para reuniones sobre temas de la comunidad, creencias religiosas y práctica deportiva.
Sobre el contexto urbano, la escala de intervención, tiene que estar en relación a la superficie de las viviendas y el número de familias, lo cual delimita una zona dentro de la ciudad, en la cual deben ubicarse equipamientos de salud, educación. Además en su movilidad, conectarse a la red de vías en la ciudad.
El término diverso, según Jacobs, el sector debe cumplir más de una función ó uso combinado de suelo (vivienda y comercio) para garantizar la presencia de personas que salen de sus hogares en horarios diferentes y que estén allí con fines distintos.
La accesibilidad en el espacio público debe estar desprovista de barreras, se considera el uso de rampas y materiales constructivos, según su ubicación en el diseño y región en el país.
En cuanto a calidad de vida, como un derecho indiscutible para cada familia, se involucran algunos autores con responsabilidad social, desde los gobiernos, organizaciones no gubernamentales y la academia en proyectos de investigación para solucionar el déficit de habitabilidad en algunos sectores de la ciudad.
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